Recuerdo la primera vez que visité la casa de Pablo Neruda en Isla Negra, nos recibió una Guía (hoy usan el sistema de audioguía), quién en la entrada de la casa nos dijo: “cuando entren a esta casa, deben tener en cuenta que el lugar, el tipo de construcción, los materiales, la decoración, no fue obra de un arquitecto o constructor, sino de un poeta”… Cuanta razón tenía, por ejemplo, en el pasillo que comunica el lugar de acceso con el comedor, al lado derecho, hay una ventana que da hacia el mar. A ese lado hay en el suelo botellones de vidrio de diferentes formas y tamaños en colores azulados. En el lado izquierdo, otros botellones también diversos de colores marrón. La explicación fue que los de color azul están al lado del mar y los de color marrón del lado de la tierra… En el mismo pasillo hay una ventana hacia el lado del mar, con unas repisas llenas de barcos en el interior de botellas, ¿porque en ese lugar?, porque al mirar hacia el mar, se puede ver como los barcos navegan…